Los datos económicos siguen dando buenas noticias a China
Si la semana pasada los analistas de JP Morgan anunciaron que la economía china se convertiría en la segunda más grande del mundo al superar a la de la eurozona tras alcanzar un producto interior bruto (PIB) de 14 billones de dólares en 2019, ayer se conoció que el El gigante asiático se convirtió en el primer vendedor en España por delante de Alemania.
En la misma línea, el banco de inversiones estadounidense advirtió que la capacidad de recuperación de China durante la pandemia la acercaría más a Estados Unidos de lo esperado con un PIB de 21,3 billones de dólares.
El comportamiento de la economía en China a lo largo de este año sorprende a todos los analistas. Tras controlar la pandemia en unos meses, el gobierno de Pekín anunció ayer un incremento interanual del PIB en el tercer trimestre del 4,9%, cifra que genera envidia en otros estados y vuelve a mostrar que una rápida recuperación económica solo es posible en el caso para controlar el virus.
«Necesitamos hacer de los consumidores la piedra angular de nuestra economía. Esto mejorará nuestra resiliencia»
Tras una caída del PIB del 6,8% en el primer trimestre y una subida del 3,2% en el segundo, los datos del tercer trimestre lo sitúan en una expansión anual del 0,7% y cercana al 2% previsto por el Fondo Monetario Internacional (FMI). y por el Banco Mundial.
Según las autoridades chinas, el crecimiento es insuficiente, a pesar de ser la única economía mundial que finaliza el tercer trimestre en positivo.
El consumo interno es uno de los factores que explica esta situación. En este sentido, el Gobierno chino se reúne esta semana para aprobar el plan quinquenal (2021-2025), donde el consumo interno pasa a ser un eje central. «Necesitamos hacer de los consumidores la piedra angular de nuestra economía. Esto mejorará nuestra resiliencia”, dijo al Diario del Pueblo de Qui Baoxing.